domingo, 23 de febrero de 2014

Causa ESMA III: Crónica del 19 de febrero de 2014

Hoy, 19/02/14, declaró Néstor Correa, ex secretario general y actual secretario de prensa del sindicato de docentes universitarios, la Asociación Gremial Docente de la UBA. Militante de Política Obrera (hoy Partido Obrero), Correa fue preso político durante el gobierno de Isabel Perón y la Triple A por su participación en la rebelión obrera conocida como el "Villazo", protagonizada por los trabajadores metalúrgicos de Villa Constitución, provincia de Santa Fe, en el año 75. Cuando los militares dieron el golpe de 1976, Correa se encontraba en la cárcel.
Laura Dabas comenzó a militar durante el secundario en el Colegio Lenguas Vivas donde formó parte de la Ters, ya a muy temprana edad conoció a Néstor con quien se casó y con quien compartían el llamado a una militancia revolucionaria, y así se incorporaron a Política Obrera, una organización que  hacía una crítica sistemática al foquismo y al peronismo, al tiempo que desarrollaban una militancia intensa de los estudiantes en el movimiento obrero. En ningún momento dejó de acompañar a Néstor mientras rotaba de penal en penal, y comenzó a militar en el Movimiento de Familiares de detenidos y presos por razones políticas donde conoció a Alfredo Astiz, que se había infiltrado entre ellos. Supo de la verdadera identidad del marino cuando fue revelada por los medios.

Mientras Nestor  permanecía "a disposición del Poder Ejecutivo Nacional" -sin causa ni proceso- en el penal de Rawson, su esposa Laura  fue secuestrada por los grupos de tareas de la Esma.
Laura -que falleció hace algunos años en un accidente automovilístico- pudo referirle a su compañero los detalles de su cautiverio recién un año más tarde, dadas las condiciones de detención que él todavía sufría en Rawson y la vigilancia que los represores mantenían sobre ella.
Laura fue secuestrada el  21 de septiembre del año 77, en el domicilio donde vivían  junto a sus hijos Máximo y Diego, de 3 y 4 años en aquel entonces. La patota invad el departamento en la madrugada; llegaron en autos Falcon, vestidos de civil y fuertemente armados. Revisaron todo el departamento y se apropiaron de documentación y otros papeles personales. Laura logró convencer a los secuestradores de que dejaran a los niños -que se aferraban aterrados a su pijama- con la empleada.  La llevaron encapuchada en un Falcon con techo vinílico a un primer centro clandestino donde fue torturada durante 24 horas antes de ser trasladada a la ESMA.
Le preguntaron por nombres de compañeros del movimiento de derechos humanos, familiares de detenidos por razones políticas, junto a los cuales mi compañera militaba”.
En ese primer lugar de detención, Laura se encontró con otro militante de PO, Fernando “el Cura” Sanchez, quien permanece desaparecido desde el año 1977. Fernando Sanchez fue trasladado a la Esma; donde también vio a otros militantes de PO a los cuales Laura pudo identificar: Graciela Granica, Juan José Cuello y Gustavo Grassi ("Mondragón"). Mondragón también permanece desaparecido hasta el día de hoy.
Laura fue liberada en los primeros días de octubre, en un auto que compartió con Granica y el Gallego Cuello.
Durante su paso por la ESMA, Laura constató la existencia del cuarto de las embarazadas, "porque fue el lugar donde curaron las heridas que tenía por permanecer engrillada, esposada y vendada".
Nestor aportó también que Fernando Sanchez estuvo detenido con él antes del 76, cuando ya la represión estaba desatada. "La banda de las tres A estaba integrada por muchos de los que después se convirtieron en los torturadores y responsables de la dictadura".
“Tanto Fernando como yo -que era delegado sindical de una fábrica metalúrgica muy grande- caímos presos por nuestra actividad política y gremial, sin ninguna otra acusación…”.
"Militábamos en Política Obrera, que es el antecedente de la organización política que va a dar lugar en el año 83 al actual al Partido Obrero. Política Obrera era una organización -como lo es hoy el Partido Obrero- que pugna por  la transformación profunda de la sociedad, por el  socialismo, que lucha contra el capitalismo y por un gobierno de trabajadores.”
Laura estuvo en "capucha" y en "capuchita", dijo Correa: "yo he visitado la Esma. La he visitado con el movimiento de Memoria, Verdad y Justicia, en defensa de que la Esma no sea transformada en  lo que no es; que sea un lugar que permita, no en un sentido perverso, si no en un sentido amplio conocer la historia de nuestro país. Ella estuvo en lo que se llamaba 'capucha' y, en algún momento, en 'capuchita'. Pude reconstruir los recorridos que ella me describió del lugar.
El 25 de diciembre de 1978, Laura y Néstor pudieron escapar a Brasil junto a sus hijos. Allí continuaron su lucha y lograron arrancar la primera solicitada publicada en Clarín contra el genocidio, que fue firmada por Chico Buarque de Hollanda, Milton Nascimento, y otros artistas e intelectuales, denunciando lo que ocurría en Argentina. “Cuando explicábamos que secuestraban a los niños, que les quitaban la identidad, la historia, recuerdo que esta gente se levantaba de las sillas de indignación. Sí, seguimos trabajando para que esto  que allí era chiquito ocurra, para que haya justicia, juicio y castigo a todos.”
Néstor concluyó manifestando que su presencia en este juicio -"aun con las enormes limitaciones que tiene"- es un triunfo de los que siguieron luchando a pesar de todo.
Quiero rendir un homenaje a todos los luchadores sociales, que son los que han construido nuestro país y todo lo bueno que tenemos, la educación; en particular, a los luchadores por los derechos humanos que han mantenido su vigor, muy en particular a Adriana Calvo de Laborde, fallecida, secretaria adjunta del gremio de los docentes universitarios que yo presidía. A mi compañera, un homenaje. Un homenaje al gran Fernando Sánchez y todos los compañeros del Partido Obrero, no porque sean mejores que ningún otro luchador, sino porque son mis compañeros en particular.”
Lo que ha ocurrido no fue el acto salvaje, inhumano, brutal de algunos individuos enloquecidos: se trató como un genocidio, de un plan premeditado para eliminar a la gran juventud trabajadora, estudiantil, popular de Argentina que se levantaba contra un país que ya en ese momento estaba siendo quebrado.”
Correa solicitó expresamente al tribunal que se defina a estos crímenes como genocidio, “no porque eso sólo de por sí inmediatamente va a llevar a la silla de los acusados a quienes financiaron el golpe, a los que los bendijeron a quienes iban a secuestrar, torturar y matar,  deben estar en el banquillo de los acusados. Creo que se trata de un genocidio social y político. ¿Y cuál es el valor de decirlo? Que las nuevas generaciones, las actuales generaciones, deben conocer bien lo que ocurrió".
"Ya en este momento, un  gobierno que ha impulsado en parte estos juicios pero que, a la vez, les pone limites increíbles, nombra como comandante de las fuerzas armadas a alguien sospechado, denunciado -el general Milani- como partícipe que, como mínimo, tendría que ser investigado”.
En ese momento los aplausos llenaron el silencio de la sala.
En esta audiencia  hubo además otros testimonios.
También declaró Yamila Zabala Rodriguez, hija del ex diputado Miguel Angel Zabala Rodriguez  y de Hilda Cañuete.
El 22 de diciembre de 1977 delante de Yamila y su hermana, asesinan a su padre y secuestran a su madre delante de las niñas. A las nenas de 4 y 2 años las dejan en ese mismo lugar, y por la madrugada, las llevan a la comisaría de la zona y de ahí, al Instituto Riglos de Moreno, por donde pasaron hijos de compañeros detenidos y desaparecidos.
En el instituto estuvieron 3 meses hasta que sus abuelos logran dar con las niñas. 
Su tía Julia Zabala Rodriguez también desapareció en noviembre de 1978 y estuvo cautiva en El Olimpo para ser trasladada luego a la Escuela de Mecánica de la Armada, el mismo centro clandestino donde encontró su destino final su madre. Zavala Rodriguez fue junto a los Lizaso, uno de los fundadores del Partido auténtico.
El cuerpo de Zavala Rodriguez fue entregado a la familia con la condición que no se realizase velatorio.
Sebatián Rosenfeld Marcuzzo nació en la Esma en 1978 cuando a su mamá Paty Marcuzzo la trasladan desde Mar del Plata donde fue secuestrada y estuvo cautiva con su compañero Walter Rosenfeld. Ambos, militantes de la JUP fueron vistos por última vez el día de la madre de 1977 cuando informaron a sus familias que Paty estaba embarazada. Luego de búsquedas infructuosas, llegó un grupo de gente en auto a la casa de la abuela materna y, recibidos por su tía Sandra Marcuzzo –quien también prestó testimonio hoy- le dejan a Sebastián en un moisés con una carta de su madre que decía que lo iban a tener que cuidar.
Graciela Daleo, sobreviviente de ESMA le entregó un pañuelo bordado por Paty que tenia un fragmento de la canción de Serrat “De parto”.

Luego declaró Juan Héctor Marsicovetere, amigo de la infancia y compañero en sus inicios de militancia de Víctor Cetrángolo. A Víctor lo llevan a El Olimpo y se reencuentra con su amigo en la Escuela de Mecánica de la Armada donde también estaban Deudeves, Fatala entre otros. Marsicovetere fue liberado  y secuestrado nuevamente tiempo después, donde también, la patota militar le robó una suma importante de dinero.

jueves, 20 de febrero de 2014

Masacre de San Patricio: Declararon un cura palotino y el hermano de una de las víctimas

Un sacerdote palotino y el hermano de una de las víctimas declararon como testigos en la causa penal sobre el asesinato de cinco religiosos de esa comunidad en la iglesia San Patricio de esta capital, durante la última dictadura cívico militar.

Los testigos fueron convocados por el juez federal Sergio Torres quien, en un desprendimiento de la denominada Causa ESMA, investiga el homicidio de los padres palotinos Alfredo Leaden, Alfredo Kelly y Pedro Duffau, y los seminaristas Salvador Barbeito y José Emilio Barletti, el 4 de julio de 1976.

    Los sacerdotes y seminaristas palotinos fueron asesinados por un grupo de tareas que los fusiló luego de identificarlos y dejar inscripciones en las que acusaban a los religiosos de "envenenar la mente de nuestra juventud"

Primero declaró el sacerdote Mariano Pinasco, miembro de grupos juveniles parroquiales cuando se registró el hecho, para quien la denominada Masacre de los Curas Palotinos se debió a la línea evangelizadora que realizaban, "claramente marcada por la teología latinoamericana, centralizado en lo pastoral".

Pinasco, profesor en la facultad de Santa María, en el sur de Brasil, contó que la tarea pastoral, "a favor de los que más sufrían" fue "muy intensa con un fuerte movimiento de jóvenes para despertar conciencia de todo lo que ocurría en los `70 en el continente, particularmente en nuestro país".

El testigo refirió que "los sermones, en los que se aludía a la desaparición forzada de personas, y las prédicas de los sacerdotes comenzaban a surtir efecto, lo que generó desconfianza y descontento en quienes apoyaron el golpe militar de marzo de 1976".

Agregó que, según surge de los libros diarios de las víctimas, los sacerdotes "recibían amenazas de muerte".

Tras testimoniar, Pinasco, dedicado a la investigación histórica y a trabajar en el campo de los derechos humanos, expresó ante los periodistas sus deseos de "mantener viva la memoria y que se pueda llegar a un objetivo concreto, para encontrar a los responsables del quíntuple homicidio".

En segundo turno declaró Gastón Barletti, quien recordó la última carta que su hermano le escribió a la madre de ambos, misiva que el testigo calificó como un agradecimiento y a su vez una despedida.

Antes de concluir con su testimonio, Barletti manifestó al juzgado sus intenciones de presentarse como querellante en la causa.

Los sacerdotes y seminaristas palotinos fueron asesinados por un grupo de tareas que los fusiló luego de identificarlos y dejar inscripciones en las que acusaban a los religiosos de "envenenar la mente de nuestra juventud".

La investigación de la masacre fue iniciada en 1976 y suspendida el año siguiente, hasta que en 1984 se reabrió la causa.

Las indagatorias en sede judicial comenzaron el lunes pasado, con el testimonio del excura palotino Roberto Killmeate -que en esa fecha estaba en Colombia y pudo eludir la masacre- y de un sobreviviente de la ESMA.

Precisamente, por testimonios de sobrevivientes, existen indicios acerca de que los responsables de los crí­menes pertenecí­an a un grupo de tareas de la  ESMA.

Es el caso de Graciela Daleo, que en el juicio oral y público por crí­menes en ese centro clandestino declaró que "Perní­as (Antonio) se jactaba de haberlos asesinado", al referirse al exoficial de inteligencia condenado por delitos de lesa humanidad.

miércoles, 19 de febrero de 2014

Causa Esma III: Crónica del día 17 de febrero de 2014.

En la audiencia de hoy se expuso el caso de la familia Pisarello-Milesi. Declararon María Laura Pisarello Milesi, María del Huerto Pisarello y Rolando Pisarello, los tres conducidos a la Escuela de Mecánica de la Armada una vez secuestrados en Uruguay.
En diciembre de 1977 una serie de caídas en Montevideo terminó poniendo cautivos en Esma a adultos y niños. Junto a los Pisarello Milesi, cayeron Rosario Quiroga con sus tres hijas,  Jaime Dri, Raquel Odazo, Luisana Olivera, Jaime Brancoy y Miguel Angel Estrella. Contemporáneamente fue asesinado Alejandro Barri y en el operativo donde secuestran a María del Huerto y Rosario, matan a Susana Matta de Barri. Su hija, Alejandrina, fue conducida también a la Argentina.
Una vez que el pequeño avión que conducía a los Pisarello descendió en el aeroparque fueron llevados a distintos lugares del centro clandestino. Fue el mismísimo Tigre Acosta quien les informó dónde se encontraban. Allí permaneció al menos un día, su hija de 4 meses, hasta que fue entregada a sus abuelos que vivían en Santa Fe.
María del Huerto, pudo dar cuenta, como vienen haciéndolo los testigos que existía un organigrama con los nombres de los militantes que buscaban, también recordó que Monseñor Emilio Graselli, secretario privado del vicario castrense Adolfo Tortolo, fue quien gestionó sus visas, cuando los marinos les dan la opción de salir del país. Recordamos al lector, que Graselli tenía un fichero en el que figuraban los casos de personas cautivas. Madres y familiares desfilaban por su despacho buscando información de sus hijos. No se comprende cómo Graselli no está sentado en el banquillo de los acusados y preso. Conforme con los testimonios de estos últimos días, Rolando y María del Rosario describieron a Carlos Galeán –Pedro Bolita-, Orlando Gonzalez -Hormiga-, Guillermo Pazos – y a Norberto Savio, todos imputados en esta causa.
A su tiempo, recordaron a compañeros detenidos desaparecidos en Esma, como Loli Ponce, el Bicho García, la Negra Orazi.
Rolando testimonió que cuando llegó a la Esma le llamó la atención la cantidad de gente que había en Capucha y que “…de un día para otro dicen busquen nueva ubicación, córranse, y cuando nos movemos nos vamos bastante al fondo, se había ido bastante gente. Nos llamaba la atención que en el pañol que estaba en frente, en algunas guardias, podíamos ver la ropa de la gente que estaba en malas condiciones y mucha de esa ropa apareció en el pañol, así que a donde fueron no necesitaban nada de eso.”

El caso de Alcira Graciela Fidalgo, la Biónica, fue rememorado por su hermana, Estela, quien prestó testimonio en el día hoy.  Alcira, de 27 años fue secuestrada de la casa de una amiga de su madre donde había pasado unos días en el barrio porteño de Belgrano el 4 de diciembre de 1977. La familia de la Biónica se entera de su cautiverio en la Escuela de mecánica a partir de cartas que les envían compañeras una vez que recuperan su libertad. Por ellas pudieron saber que estuvo en capuchita. Con una profunda emoción recuerda que su hermana era una artista, y que a su mamá le entregaron ex detenidas desaparecidas, figuras de cerámica que Alcira hizo durante su cautiverio. Mientras exhiben las pequeñas esculturas, Estela dice: “Las cartas de las compañeras le refieren a mi madre haberla visto en capuchita, y que le trasmiten como una persona con mucha entereza, le decía la biónica por su condición de coraje como mujer y persona en esa situación de enfrentar esa situación, decían que Alcira iba a salir sin ningún tipo de inconveniente de esa situación de secuestrada con apremio y legal y falta de derecho, ellas lo pensaron. No fue así.”
Finalmente Serrat, otra víctima que pasó por la ESMA brindó precisiones sobre su secuestro el que ocurrió el día 10 de noviembre de 1977 a las 6 de la mañana en la esquina de Cabildo e Iberá. Los interrogatorios a los que fue sometido rondaban en su participación como garante de Pablo Giusani, quien alquiló la casa de Tigre donde vivía Rodolfo Walsh.

El miércoles 19 declarará Néstor Correa, ex secretario General de ADG UBA y militante del Partido Obrero, cuya mujer, estuvo cautiva en Esma. Correa fue preso político desde el año 1975, cuando fue detenido por su participación en Villazo de Villa Constitución.
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Causa Esma III: Crónica del 14 de febrero de 2014

Amalia Larralde, sobreviviente de la Escuela de Mecánica de la Armada, vino a ampliar la declaración que prestó en el segundo tramo de la causa Esma.  En esta oportunidad, describió a Pedro Bolita – el imputado Carlos Galián- que era un “Pedro”. En la ESMA se les llamaba  Pedro a los jefes de los guardias y entre otras cosas, eran los que llevaban a los secuestrados cuando se los movía de un sitio a otro del Centro, y cuando se producían los traslados. Durante su cautiverio, Amalia pudo ver el organigrama que tenían los genocidas en El Dorado, donde figuraba qué “la gente que faltaba agarrar, que querían agarrar” de la organización Montoneros.

Recordó además, que Jorge Caffatti le dejó una poesía: “él hace todos unos versos respecto de la gente que estaba en capuchita, donde nombra gente que está en capuchita, y después, al final de la poesía él pone yo me iré no se a dónde será para encontrarme con el Yaca, Manuel, y unos amigos.¨" Cuando a él lo trasladan, trasladan a Yacaré que era un muchacho que estaba ahí, y a unos chicos que habían agarrado en Uruguay y que eran de Rosario. Creo que Manuel era él.”
Unas crónicas atrás, contábamos que en el abogado Daniel Díaz Lestrem, meses después de su desaparición fue encontrado muerto bajo un puente en la zona de Palermo vestido con traje. Amalia cuenta que a Díaz Lestrem lo hicieron vestir de traje y corbata. Al día siguiente apareció en el diario. Larralde reforzó la acusación contra otro de los genocidas imputados en esta causa, Gonzalez Menotti “el gato” que fue quien torturó a Díaz Lestrem.
No dejó pasar que hubo un gran operativo y que traen muerto a la ESMA a Manuel Menendez.  Los marinos obligaron al padre de Manuel a escribir una carta de agradecimiento por el comportamiento que tuvieron al devolver el cadáver de su hijo.

Contó que en el 79, en el centro clandestino, hubo una visita de la Junta de Almirantes, entre ellos Lambuschini. El defensor Fanego le preguntó: “¿eran todos contestes de lo que sucedía ahí en la Esma? ¿Sabían lo que sucedía? Amalia lo miró y dijo: “Aparentemente si, y si no lo sabían antes lo supieron después porque estuvieron en la visita”. Minutos antes había descrito la acción de esos almirantes que recorrieron las instalaciones, fueron al sótano, hablaron con los secuestrados y estudiaron las estadísticas que les exhibieron sobre las personas a quiénes habían agarrado, a los que habían matado y a los que habían trasladado.
Respecto de los traslados, afirmó que los hubo individuales y colectivos: “Me acuerdo que una vez me llevaron al sótano y estaba diferente, estaba raro, y había un olor muy fuerte, como de transpiración, de miedo y ahí supe que había habido un traslado de varias personas. Yo vi por la ventana del baño cuando se llevaron a Caffatti en una camioneta amarilla.”
Entre las fuerzas militares que dominaban en cada centro clandestino de detención, intercambiaban secuestrados, Amalia recordó que en el 78, llegó un grupo de El Banco, entre ellos Caballo Loco, que era el médico Jorge Vazquez.
En el 79 Thelma Jara de Cabezas integraba la Comisión de Familiares de Detenidos y Desaparecidos por Razones Políticas, su hijo Gustavo había sido secuestrados dos años antes. Thelma, de 52 años, fue secuestrada y llevada la Esma donde fue torturada. Larralde recordó que fue a instancias de Cavallo que “le hicieron hacer una conferencia de prensa en Uruguay y también salió en ese momento un artículo en la Revista Para Ti, haciendo como que estaba libre”.
Para ilustrar ese falso reportaje, El Hormiga –otro imputado de nombre Orlando Gonzalez-, un genocida aficionado a la fotografía la retrató en la Panamericana delante de una publicidad uruguaya para simular que estaban en Montevideo, pero no conformes con ese trabajo la llevaron a Uruguay con un documento falso –seguramente fabricado en la ESMA-. La nota llevaba como título: Habla la madre de un subversivo muerto.”

Su cuñada, Mirta Cappa de Khun, también pasó por ESMA, y el encargado de torturarla hasta el hartazgo fue Rolón, quien en de vez en vez se presenta en la sala de audiencia.

Fue entonces el turno de Marcia Roxana Seias, compañera de Rodolgo José Lorenzo, ambos eran parte de la Secretaría Técnica de Montoneros. Esas caídas correlativas se llevaron no solo a Lezcano si no que también secuestran a Jorge Lazarte junto a su compañera Ema Donofio, Ana María Ponce “Loli” y Claudio Samaja. A Rodolfo lo chupan el 13 de agosto de 1977 cuando iba a una cita con el Vikingo, Claudio Samaja. Por la Esma pasaron otros integrantes de la secretaria técnica como Alicia Pirles, Claudio, Fanti. En una audiencia anterior, el hermano de Jekel recordó a un tal Fanti, compañero del buzo táctico al que nunca más volvió a ver.
Esa misma noche, irrumpieron en la casa de Marcia: “Nos vaciaron la casa, se llevaron hasta los pañales, hasta la bolsita de agua caliente, los chupetes, los tenedores, las sábanas, las mesitas de luz. Todo se llevaron. Sellaron la casa. Lo más triste es que dijeron que estábamos llenos de armas, lo que no es cierto porque hasta  ese momento nuca había tenido un arma en la mano.”

Nueve días después del secuestro de Rodolfo, nació su hija María Victoria quien tardó más de veinte años en poder llevar el apellido de su padre.
La audiencia la cerró Hebe de Goldman, amiga de la familia Tarnopolsky. Simón, su padre, y Hugo Tarnopolsky perrmanecieron juntos hasta el momento de su desaparición. “como eran cercanos y conocidos, nosotros, los hijos de los socios hemos tenido relación desde muy chiquitos porque hemos ido a veraneos juntos, vacaciones, cumpleaños”. Hebe contó que en 1976 cuando sucedieron los hechos, fue su padre quien le contó que habia desaparecido toda la familia. Que habían volado la puerta de la casa familiar llevándose a Hugo y Blanca (los padres), robándose sus pertenencias, que buscaron a Bettina, de tan solo 15 años de la casa de abuela y que secuestraron también a la esposa de Sergio. Todos esa misma noche. Los socios y amigos de Hugo, no dejaron de investigar qué pasó con los Tarnopolsy y brindaron protección a Daniel.
La familia Tarnopolsky fue llevada a la Esma, permanecieron el sótano y fueron salvajemente torturados.
Hebe concluyó su testimonio expresando: “Lo que deseo es que se aceleren estos juicios porque van falleciendo los que tienen los datos.”
La impunidad biológica y el pacto de silencio es uno de nuestros mayores enemigos, por ello seguimos exigiendo al estado la apertura de todos los archivos de la dictadura. 

jueves, 13 de febrero de 2014

Causa Esma III: Crónica del 12 de febrero de 2014

La defensora oficial del genocida Cavallo presentó una nueva excusa para pedir la suspensión de la audiencia y oralizó que acababa de presentar un escrito donde recusaba a la Fiscalía interviniente por “Enemistad manifiesta” contra su defendido. El escrito presentado por la defensora Mariani no solamente es una petición risible y propia de una identidad ideológica con los marinos si no que carece de todo sustento fáctico y jurídico, ya que como del mismo surge, cuestiona al ministerio público fiscal por una causal no expresada en el código penal. Este cuestionamiento fue realizado a partir de entrevistas que Mercedes Soiza Reilly y Guillermo Friele concedieron a los medios de comunicación.  Las vacaciones a los defensores les renuevan los bríos para seguir haciendo el ridículo.

La audiencia prosiguió de inmediato con las testimoniales. 

La presencia de Pernías, quien no asiste asiduamente, se debió a la declaración que presentaría Francois Cheron, el abogado que el presidente de Francia, Valery Giscard d´ Estaing envió a la Argentina luego de la desaparición de las monjas Alice Domon y Leonie Duquet.
Cheron declaró que tuvo varias reuniones con distintos oficiales de la marina, entre ellos, el propio Pernías y otros imputados de esta causa como Jorge Radice y Astiz. Ellos las llamaban “las monjas voladoras” con sorna.
Cheron indagaba a los marinos, entre ellos a Massera y cuenta: “Me dieron explicaciones increíbles en cuanto no se podía conocer la identidad de esa gente, que como se trataba de terroristas, que tenían papeles falsos, cuando estaba preso no se podía saber quién era. Eso me parecía extraño, porque tratándose se las monjas, yo no me imaginaba a esas dos monjas viviendo acá en Buenos Aires, que tuvieran identidad con documentación falsa ... Lo único podía ser la muerte de esa gente” La lista que trajo Cheron, tenía más 100 ciudadanos franceses desaparecidos entre 1975n y 1978.

Pipi, Lanita y la Colorada “los cordobesitos” eran tres militantes de la JUP cuyo destino final fue un traslado que partió de la Escuela de Mecánica de la Armada.  Norma Morandini, hermana de Nestor (Lana) y Cristina (Pipi) prestó declaración en el día de hoy. El 18 de septiembre de 1977, luego de pasar el domingo con su sobrino en el parque Lezama encontraron su fatal destino. Nestor se encontraría con su compañera Alicia Hobbs y salió de la casa de Norma para no regresar. Cristina, en cambio fue arrancada del departamento de su hermana, con extrema violencia delante de  su sobrino de 7 años. Alberto Giles y Nelson Marinelli, periodistas y vecinos de Norma, se quedaron a acompañarla esa dolorosa noche.
Su madre, Rosa Huespe de Morandini fue una de las fundadoras de Familiares de desaparecidos de Córdoba  que se organizaron para denunciar y buscar los destinos de sus afectos.

Un extenso relato fue el que brindó Selva Santi sobre lo que pudo reconstruir respecto del secuestro y desaparición de su hermano Roberto Santi y su mamá Esther Iglesias de Santi. El 27 de mayo de 1977 alrededor de las 18 horas en circunstancias que transitaban frente al domicilio fueron rodeados por personas que los introdujeron por la fuerza en dos autos Falcon. A partir de testimonios de sobrevivientes, se supo que ambos fueron llevados a la Esma y trasladados. Selva puso en evidencia una manera extra de silenciamiento y lo fallido de los procedimientos judiciales testimoniando que:
“Ese secuestro de mi madre y mi hermano no culminó el operativo ya que los efectivos que intervinieron en él, parte de esos efectivos permanecieron en las intermediaciones y estaban al acecho a la espera de una tercera persona. De esa persona no pudimos determinar la identidad. Testigos presenciales dijeron a familiares que lo redujeron por las fuerza, lo llevaron al domicilio de mi madre en la calle Araoz… Y allí se producen ruidos de impacto muy fuerte, gritos, por lo que se deduce que habría habido resistencia, y por los gritos posteriormente que la persona habría sido sometido a tormentos o golpeada por lo menos.”… “En cuanto a la tercera persona que fue víctima del secuestro dentro del marco del mismo operativo, mi tía, que era dibujante y modista, en función de las ropas de esta persona, porque quedaron ropas en el departamento, un pequeño bolso con mudas y zapatillas, pudo establecer que se trataría de una persona de estatura media, hombre, y por los cabellos que quedaron en vestimenta, deducían que debía ser castaño. No había documentos que permitieran establecer su identidad. No me aceptaron en ninguna parte, cada vez que mencioné a esta persona, no me dejaron consignarla por el desconocimiento de un nombre, pero si una persona o familia está tratando de saber qué pasó con un familiar con esta somera descripción, tal vez les permita tener un punto de partida para investigar.” Es injustificable que la justicia no haya nunca investigado quién pudo haber sido esa tercer víctima del genocidio.

La casa de los Santi fue arrasada. Selva vivía en el exterior y cuando toma conocimiento,  envía cartas a diversos organismos de derechos humanos internacionales, al Congreso de Estados Unidos, a la Nunciatura, la misma noche que se enteró le escribió a Massera recordándole que su padre había sido marino y que su madre padecía una enfermedad renal. Posteriormente Selva fue una de las pioneras del CoSoFam - Comité de Solidaridad con Familiares de Desaparecidos- donde empezaron a realizar denuncias en Europa y conferencias de prensa con los sobrevivientes, y gracias a esa actividad, empezó a conocer el destino de su madre y hermano. Esther, ayudó en varios partos ocurridos en la maternidad clandestina de la Esma. Los testimonios coinciden en que habrían sido trasladados en agosto 1977.

La última en declarar hoy fue Virginia Hall, hermana de Patricia. El 16 de octubre de 1976 una patota ingresa por la fuerza al departamento que Patricia compartía con su marido, Gerónimo Da Costa en el barrio de Boedo. Fue el portero del edificio, quien les contó días después que lo esa mañana se lo llevaron a Gerónimo y pudieron constatar los destrozos que tenía el departamento y el robo de todo lo que había en la casa.
El mismo 16, pero cerca del mediodía, se presenta la patota en el Policlínico Privado –hoy Sanatorio Mitre- donde trabajaba Patricia. Reúnen al personal del nosocomio en el hall y exhiben el recibo de sueldo de Patricia solicitando la identifiquen. Como nadie decía nada, el grupo de tareas les dijo que la señalen o abren fuego, y una compañera de trabajo así lo hizo. A Patricia la toman por el brazo y se la llevan a rastras
La última noticia que de los chicos fue a un mes aproximadamente de los secuestros, cuando represores ingresan a la imprenta familiar que tenia el padre de Gerónimo, lo encapuchan, lo atan y revuelven todo el lugar. Allí escuchó la voz de su hijo que les decía a los genocidas que no tenía nada allí.
Gerónimo y Patricia permanecen desaparecidos al día de hoy y fueron vistos en la Esma.

La audiencia de hoy fue una nueva muestra de la atrocidad militar y al mismo tiempo, de que las investigaciones y el conocimiento parcial de lo ocurrido con los detenidos desaparecidos se debió a la valentía y lucha constante de organismos de derechos humanos, sobrevivientes, familiares, amigos y compañeros comprometidos con la justicia.  
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lunes, 10 de febrero de 2014

Nuevos testimonios y otro genocida muerto impune

Terminada la feria judicial, se reanundaron las audiencias en el juicio ESMA III. Este tercer tramo  del juicio oral arrancó el 28 de noviembre de 2012. Durante este tiempo ya declararon 94 sobrevivientes y 174 familiares, compañeros y amigos de desaparecidos.  La impunidad biológica sigue haciendo mella, y un imputado más muere impune. Durante la feria judicial encontró la muerte el genocida Carlos Generoso, cuyo alías es Fragote, parte del grupo operativo de la Esma.

 Como todo reestreno, los defensores tienen que hacer su show, y hoy sin pena ni gloria lo expresó el defensor Fanego -¡Secretario del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal!- quien solicitó la nulidad del juicio.  La presidencia del Tribunal, esta semana a cargo del Dr. Obligado, pidió que sintetice los argumentos para poner en conocimiento a las partes y dijo que lo resolverán oportunamente.  A partir de allí, comenzaron las declaraciones testimoniales.

La primera testigo de hoy fue Alicia Orlando, sobrina de Irene. Por medio de un llamado de una amiga de su tía se enteraron del secuestro. Irene, había sido citada por genocidas que le ofrecieron devolver a su hijo, Mario Tempone, que estaba secuestrado, a cambio de un dinero. Irene no dudó y vendió todo lo que tenía. La suma que se estima ronda los U$s 80.000.

Los padres de Irene movieron cielo y tierra y entre el derrotero recurrieron a una entrevista con Monseñor Graselli. Graselli, tenía un fichero con las personas desaparecidas  en el que consultaba para darle algún tipo de "respuesta" a las familias.  En rigor, Graselli, su fichero y su cinismo –su modus operandi era intentar confundir y sacar datos a los familiares desesperados que acudían a las reuniones- son mencionados audiencia tras audiencia, sorprende que todavía se mantenga en libertad.  Irene Orlando dice: “Cuando ellos le preguntaron por mi tía, y por mi primo Mario Tempone, les dijo que “ no pregunten más”. Mi mamá le dijo “¿qué significa no pregunten más?” y Graselli les dijo que “no pregunte más porque se la iban a agarran con toda la familia.”

Irene Orlando, tenía 60 años, era psicóloga y tenía problemas cardíacos. Fue secuestrada en diciembre de 1977 y vista en la Escuela de Mecánica de la Armada.
Con sus más de 90 años a cuesta y con una entereza como pocas, llegó al estrado Clementina Lopez para prestar declaración testimonial sobre la desaparición de su hijo Juan Carlos Ramos a quien secuestran el 23 de septiembre de 1977. Unos compañeros de trabajo de Carlos, el negro que era delegado en una compañía de seguros, les dijeron que lo habían levantado de una confitería de la calle Entre Ríos y Belgrano. Los testimonios de sobrevivientes de Esma confirmaron que ese fue su lugar de cautiverio. Carlos era militante del Partido socialista de los trabajadores y tenía 31 años cuando lo chuparon.

El testimonio más largo del día lo brindó Walter Jekel, hermano de Rolando, militante montonero que había sido perseguido por la Triple A, y se refugió en Buenos Aires junto con su compañera. La última vez que su mamá, Olga Nayar vio a Rolando fue el día antes de su secuestro. Al día siguiente, recibe un llamado donde le informa que había sido detenido por las fuerzas conjuntas, las fuerzas de seguridad y que un oficial estaba controlando la llamada por lo que no podía decir dónde se encontraba.

Olga se encuentra con Edith Peyrano, la compañera de militancia y sentimental de Rolando, Le ofrece dinero para que se vaya a Uruguay pero Edith, rechaza la idea y decide enfrentar la situación tal como estaba planteada.

A fines de marzo del 77, un compañero de militancia de Rolando, llama por teléfono. Se trataba de Fanti, y es quien les informa que había sido secuestrado posiblemente con otros dos compañeros.  “Fanti nos hizo dar cuenta qué significaba,  la diferencia entre estar detenido y estar desaparecido.” Fanti, tenia unas pertenencias de su hermano que quiso entregarle, pero no volvió a verlo.

Hubieron 3 datos concretos para confirmar que Rolando estuvo en la ESMA, dice Jekel: Una sobreviviente que le cuenta que vio a su hermano muy de cerca mientras lo atendía un médico porque tenía una herida en el abdomen. Luego reciben una carta firmada por “Negra” que relata que vio a Rolando en la Esma y que tiempo después, preguntó por el destino y le respondieron: “a ese pibe lo vamos a hacer un buen buzo. Que iba a ser trasladado y lo iban a hacer buen buzo.” Y finalmente, el documento presentado en Europa por Osatinsky, Pastoriza y Milia donde dice que había estado cautivo en la ESMA

En la Escuela de Mecánica, Rolando se encuentra con su compañera, Edith y son trasladados juntos.
La última carta que recibió la familia Jekel fue en diciembre de 1984 y está dirigida “a un familiar de un terrorista muerto.” Es decir que sabían qué había pasado con Rolando.
Previamente al secuestro de Jekel, tuvieron un operativo en su casa de Mar del Plata donde rompieron todo el mobiliario y detuvieron a su madre.
Fanti es de apellido Lazarte, y también cayó en Esma y al día de hoy está desaparecido y como Rolando y Edith tenía 25 años. Walter concluyó su declaración con una fuerte exposición sobre los crímenes genocidas. “No se puede considerar obediencia de vida a un piloto que es cómplice que arroja personas vivas, semiconscientes desde el aire, eso se debe penalizar” “No solamente como persona o víctima de alguna manera de la represión, mi reclamo es que se haga justicia, aunque pasen 30 años más, aunque sean 100 años más, pero que esto no quede como un punto final.”

Guillermo Díaz Lestrem era abogado y el 20 de octubre de 1978 fue secuestrado. Su compañera, Blanca Matorra prestó declaración  y recordó que el 2 de diciembre de 1978, recibe la notificación que habían encontrado el cadáver el día 30 de noviembre bajo un puente en las cercanías del GEBA de Figueroa Alcorta (zona elegida por los marinos para liberar a los secuestrados). La versión oficial indicaba que murió de un paro, pero el hermano de Guillermo, que era médico desmiente esa versión.
Perez Lestrem había sido removido de su cargo defensor oficial cuando inició la dictadura del 76, y estuvo preso, primero en Devoto y luego en Sierra Chica hasta abril de 1977 por decisión de la junta militar.

Del entorno de Díaz Lestrem también fueron secuestrados Susana Caride, su secretaria, su ex esposa Nelly Ortiz Bayo, abogada, trabajadora de tribunales y militante montonera, que, a partir del primer secuestro de El Chino, pasó a la clandestinidad y Wenceslao Caballero, a quien asesinaron.

Fidel Ernesto Woitschah tenia 2 años el 19 de septiembre de 1977 cuando secuestraron a sus padres Pablina Miglio y Daniel Woitschach de la esquina de la casa de Avenida Avellaneda y Sucre de San Isidro. Él se quedó ahí “con una señora que teóricamente, mi mamá trabajaba con ella, que vio cuando se los llevan a mis padres y hace la denuncia en la comisaría de Martínez. Me quedé con ella un tiempo, hasta que me recupera la hermana de mi mamá, Alejandra, que hizo un juicio porque no me quería entregar.”
Qué supo de su padres, le preguntó el fiscal Guillermo Friele y respondió: “Lo único que se es que estuvieron en la Esma, por diarios, bah, por internet, pero nunca supe por qué se los llevaron.” Fidel tiene dos hermanas mayores que estuvieron 6 meses secuestradas y con las que pudo tener contacto hace pocos años. No hicieron la denuncia por miedo. Se le preguntó sobre la militancia de sus padres y respondió: “No, estoy buscando todavía. No se.” El brazo genocida afectó de tal manera a un nene de 2 años, hoy un hombre que todavía busca conocer quiénes fueron sus papás. Y en esa búsqueda, supo poco, pero sí que otros compañeros de sus padres como Mantecol y el Bichi,  también fueron secuestrados y estuvieron en la Esma.

Myriam Lewin cerró la ronda testimonial de hoy, y dio precisiones en torno a su declaración del tramo anterior de Esma. Esta vez su caso se está juzgando.  Habló de una relación de coordinación y convivencia entre las distintas fuerzas dentro de la Esma. Ella “pertenecía”  a la Fuerza Aérea, como también lo eran otros cautivos.

Cuando le preguntaron por Eduardo Suarez se quebró y contó que fue su profesor de periodismo. Suarez, junto a Rodolfo Walsh, Mario Galli, Sergio Tarnopolsky –todos detenidos desaparecidos en ESMA- fueron los creadores de ANCLA, la agencia clandestina de noticias, que ya en el 76 denunciaba los crímenes cometidos por los genocidas, la cantidad de militantes que se encontraban en los distintos centros clandestinos de detención, y de la existencia de los vuelos de la muerte.

Las audiencias se llevan a cabo los días lunes, miércoles y jueves desde las 9:30 de la mañana en la sala Auditorio de los tribunales de Comodoro Py.(www.apelabogados.com)

jueves, 6 de febrero de 2014

HIJOS- LA PLATA : Museo del Casino de Oficiales de la ESMA: LA DISNEYLANDIA DE FRESNEDA Y PARRILLI

Todo pasado es espectral.
Estoy convencido de que los recuerdos
son las herramientas más sofisticadas del olvido”.
Enrique Symns. “Réquiem”

A casi 38 años del golpe, la política de Derechos Humanos del kirchnerismo termina de desembarcar en las playas del Olvido empuñando los fetiches de la Armada Argentina. En esta nota los detalles del delirante proyecto de museo interactivo del oficialismo para el Centro Clandestino más grande del país. Y algunas reflexiones en torno a lo que esconden las políticas de Memoria cuando se institucionalizan.

LOS ACUERDOS
El Convenio de cooperación y colaboración para el “Museo de la Memoria en el ex Casino de oficiales de la Escuela de Mecánica de la Armada está fechado en abril de 2013, y lleva las firmas del Secretario General de la Presidencia Oscar Parrilli, del Secretario de Derechos Humanos Martín Fresneda, y del rector de la Universidad de San Martín (UNSam), el kirchnerista Carlos Ruta.

El primer dato curioso para un proyecto que intenta recuperar la memoria del Centro Clandestino más grande del país, es que entre las definiciones iniciales del acuerdo se afirma que “la recuperación, resguardo y transmisión de recuerdos son reconstruidos con un revisionismo histórico con total respeto a la memoria de las víctimas y los sobrevivientes”. Desde noviembre de 2011, cuando el gobierno creó el Instituto Nacional de Revisionismo Histórico dirigido por Mario “Pacho” O'Donell, financiado por Presidencia con 7 millones y medio de pesos por año, venimos asistiendo a la consolidación de un revisionismo kirchnerista que se presenta como una corriente nacional y popular, pero no es más que una propuesta genérica, difusa, efectista y oportunistamente compatible con las imágenes históricas colocables en librerías y documentales televisivos, para emplearla como propaganda pro gubernamental. Ello se verifica en las billikenistas, vendibles y emocionalmente efectivas producciones de los Pigna, los Brienza, los Anguita y otros subvencionados estatales para contar una supuesta historia heroica y anti-liberal siempre dentro de las lógicas de la industria cultural, y mientras se reproduce el país sojero-minero con modesta redistribución de 200 pesos mensuales, notebooks y TV digital. Pero así como en ese revisionismo kirchnerista no existe interés en cuestionar la construcción del capitalismo dependiente argentino, en los relatos de su política global de Derechos Humanos brillan por su ausencia los proyectos revolucionarios de la generación del '70, a la que conviene banalizar antes que negar. Y el proyecto museográfico para la ESMA es el ejemplo claro de la cristalización de esa tendencia. Pero no nos adelantemos..... 
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http://hijosprensa.blogspot.com.es/2014/01/museo-del-casino-de-oficiales-de-la-esma.html